Las autoridades de Migración en el Aeropuerto Internacional de las Américas investigan una supuesta mafia que recluta deportados que quieren regresar a Estados Unidos y los envía a Guatemala, para que luego continúen la travesía hacia México y de ahí ingresar a territorio estadounidense.
De acuerdo con datos aportados por funcionarios a Diario Libre, la alegada mafia opera desde Baní y Azua, con fuertes ramificaciones y contactos en esta terminal.
Diario Libre obtuvo copias de algunos pasaportes del último grupo devuelto desde ciudad Guatemala y los mismos coinciden con direcciones de Baní, provincia Peravia, y Azua.
Con relación a la operación de la supuesta banda de traficantes de ilegales, las autoridades de la Dirección General de Migración realizan una “exhaustiva investigación” junto a organismos de seguridad del Estado para detectar a los funcionarios y empleados del organismo en el aeropuerto que pudieran estar vinculados con la red.
En los últimos tres meses y de acuerdo con estadísticas que reposan en este puerto aéreo, han sido devueltos desde Guatemala unas cincuenta personas, la mitad de estos deportados desde los Estados Unidos, que intentaron penetrar como turistas y al no llenar los requisitos que exige esa nación centroamericana se le impidió la entrada.
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Según se explicó la fuente, los viajeros salen a Guatemala en vuelos regulares desde la terminal de Las Américas con pasaporte, ya que no necesitan de un visado por los acuerdos bilaterales entre ese país y la República Dominicana, pero a su llegada al aeropuerto de Guatemala son devueltos, por no cumplir con los requisitos para ingresar como turistas o comerciantes.
Migración de Guatemala exige a los viajeros que pretendan entrar en calidad de turistas, por lo menos llevar consigo tarjetas de crédito, dirección del hotel donde se hospedarán, boleto aéreo de regreso y una suma de unos cinco mil dólares en efectivo, entre otros requisitos, que la mayoría de los pasajeros no cumplen para su entrada a esa nación.
La semana pasada arribó por el Aeropuerto Internacional de Las Américas, a bordo de Aeroméxico, un grupo de ocho dominicanos devueltos desde ese país, cuya entrada no se le permitió porque no cumplían los requisitos.
“Estamos profundizando las investigaciones, a fin de establecer si realmente esas poderosas bandas de delincuentes tienen conexiones con empleados de la institución en el Aeropuerto Internacional de Las Américas,” aseguró uno de los funcionarios que investiga el caso.