World Vision alerta que República Dominicana es el segundo país con la tasa más alta de matrimonio infantil en Latinoamérica, una realidad que debe ser transformada para la protección y desarrollo sano de todos los niños/as de la zona.
Santo Domingo. Aunque recientemente, en el país, la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputado aprobó el anteproyecto de ley que prohíbe el matrimonio infantil, aun se esperan los avances y decisión del Congreso nacional para convertirla en ley tras el debate público y movilizaciones contra este tipo de abuso contra la niñez.
“Este anteproyecto es una acción que nos llena de esperanza y optimismo, donde toda la sociedad civil debe insistir para que pueda convertirse en una ley que permita reducir la alta tasa de adolescente unidas o casadas a temprana edad, así como la eliminación de la explotación y abuso sexual de niñas por adultos”, destacó Juan Carlos Ramírez, director nacional de World Vision República Dominicana.
Señala que, más allá de la aprobación de esta ley, es necesario un trabajo conjunto de concientización y formación general (incluyendo la formación técnico laboral y la creación de programas de apoyo a las familias para la generar medios de vida) los cuales faciliten la mejora de su calidad de vida y así iniciar la reducción del 36 % de las niñas y adolescentes dominicanas se casan o se unen siendo menores de edad; estas acciones permitirán abrir nuevas oportunidades para su desarrollo y autonomía social en el futuro.
Un informe realizado por World Vision revela que, en los municipios Miches- provincia El Seibo- y Tamayo, provincia Bahoruco, encabezan las comunidades de mayor tasa de embarazos en adolescentes en el país, cifras muy vinculadas a las uniones tempranas.
Para este reporte se tomó una muestra de 3,200 adolescentes de diferentes zonas del país, las cuales fueron encuestados; 1,630 de ellos revelaron que han sufrido algún tipo de relación abusiva, siendo equivalente al 51 % de la muestra. El estreno sexual precoz o embarazo adolescente (con un 8 %), matrimonio infantil (con un 2 %) y abuso sexual (21 %) encabezan la lista de los subindicadores evaluados.
Zonas más afectadas
World Vision destacó en dicho informe que, en Miches, el 42.7 % de los encuestados vienen de familias monoparentales donde las madres lideran el hogar; el 4.3 % de adolescentes vive con su esposo/a, siendo esta la tasa más alta de todos los municipios evaluados. El 11 % vive con otro miembro de la familia; y el 1.6 % vive solo/a.
En el caso de Tamayo (Ezequiel, como es conocido este programa de apoyo en la comunidad de Bahoruco) los casos de estudio fueron similares, arrojando que un 30 % de adolescentes que conviven sólo con sus madres, el 14.8 % con otros familiares y un 0.5 % vive solo/a.
“Ante esta realidad, apoyamos la aprobación por la Comisión de Justicia de la Cámara de los Diputados y estamos seguro que esta acción cuando ya sea aprobada definitivamente por el congreso y convertida en ley será una pieza fundamental que contribuirá al bienestar integral de nuestras niñas y adolescentes”, puntualizó Catalina Encarnación, Asesora Nacional de Protección de la entidad.
Para esta organización de ayuda humanitaria, la defensa a los derechos de la niñez es un compromiso de todos, por lo que exhorta a aunar esfuerzos en la búsqueda de soluciones que permitan implementar de manera efectiva, tomando en cuenta el marco legal, la protección de la niñez, así como los programas y políticas públicas que se gestionan entorno a ella.
World Vision es una organización cristiana que trabaja a favor del bienestar de la niñez más vulnerable en ocho (8) provincias del país, trabajando temas de protección y educación desde hace 31 años en el territorio nacional.