Santo Domingo.- Juan Hernández Inirio aseguró que, contrario a otros géneros literarios, la renovación formal del cuento ha sido lenta y silente, pero que sigue evolucionado hasta la actualidad en procura de su autosuficiencia frente a la novela.
Hernández Inirio pronunció la conferencia “El decálogo roto: nuevas tendencias en la cuentística contemporánea”, como parte del programa “Letras de ida y vuelta”, que organiza la Dirección de Gestión Literaria del Ministerio de Cultura y la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña (BNPHU).
“El cuento fue transformándose con menos ruido y a un ritmo más sosegado, y parte de su evolución se debe a los propios cambios en la cultura y la forma de comunicarnos”, explicó el escritor.
Destacó que, a quien domina las técnicas del cuento, le dan popularmente el título de maestro, cosa que no ocurre con la novela o la poesía, pues simplemente suele decirse gran novelista o extraordinario poeta.
Dijo que “el cultivo con excelencia del cuento se asocia a la maestría porque requiere un orden formal tradicionalmente rígido, y también porque a los grandes cuentistas se les asocia a un legado pedagógico contenido en unos famosos decálogos”.
Hernández Inirio rechazó que las observaciones de Juan Bosch, contenidas en “Apuntes sobre el arte de escribir cuentos”, sean el único método valido de escribir cuentos, y esto ha sido demostrado hasta la saciedad por grandes cuentistas.
El conferenciante afirmó que muchas sentencias de Horacio Quiroga y de Bosch tienen poco sentido en la cuentística moderna.
Asegura que el decálogo sobre el cuento, del escritor Julio Cortázar, está en el umbral de la modernidad, ya que comienza afirmando que no existen leyes para escribir un cuento, por lo que su esbozo teórico es más flexible y realista que el de Quiroga y Bosch.
“Mientras que, en el cuento clásico, el espacio, el tiempo y el narrador están muy claros y no admiten dudas, un signo de la modernidad en la narrativa es el uso de un espacio metafórico, un tiempo alegórico y un narrador poco confiable”, explicó Hernández Inirio.
Añadió que el cuento moderno puede comenzar en el nudo de la historia, para luego volver atrás, contrario a lo que ocurre con el cuento clásico.
“En otras palabras, el cuento moderno y posmoderno, en vez de ser solamente una flecha dirigida a una diana, es también un fragmento de vida, un pedazo de una historia nunca total, un periodo de situaciones que se yuxtaponen y ofrecen una mirada parcial de la condición humana o del espíritu de una sociedad”, manifestó.
La actividad se llevó a cabo en la Sala Aída Cartagena Portalatín y contó con la presencia del director de Gestión Literaria del Ministerio de Cultura, César Augusto Zapata Santos, y el director general de la BNPHU, Rafael Peralta Romero.
Juan Hernández Inirio es licenciado en Educación mención Letras, magna cum laude, por la Universidad Dominicana O&M, y se ha especializado en estudios de supervisión y ejecución de proyectos culturales.
Ha publicado los libros: “Cantar de hojas muertas”, “Musa de un suicida”, “El oráculo ardiendo”, “La insurgencia de la metáfora. Treinta poetas de los años sesenta” y “El nieto postizo”.