Por Elvin Dominici
Joseph Robinette Biden Jr. (Joe Biden) es el presidente electo número 46 de los Estados Unidos y ha llegado al poder para enfrentar dos grandes plagas que siguen afectando al pueblo anglosajón y el mundo: la pandemia global del coronavirus y terminar las ejecuciones políticas impuestas en el gobierno del líder del movimiento de la supremacía de la raza blanca, Donald Trump.
Biden salió victorioso en una elección presidencial muy polémica debido a los siguiente eventos: primero, esta fue llevada a cabo durante la pandemia global del coronavirus, segundo, las luchas intensificadas a nivel nacional sobre la injusticia racial y tercero, una profundización de la división política en el país. Todo esto no detuvo su triunfo histórico y Biden ganó con más de 81 millones de votos populares, la mayor cantidad de votos en la historia de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. El pueblo norteamericano dijo no a la reelección presidencial de Trump.
En su toma de posesión presidencial, Biden pasó de ser el primer vicepresidente demócrata de un presidente afroamericano con Barack Obama; a ser el primer presidente demócrata en llevar de vicepresidenta a la primera mujer de descendencia negra al poder, la exsenadora de California, Kamala Devi Harris. Este hecho deja marcada la nueva década con la validación de la igualdad de género en la segunda posición política más poderosa del mundo.
Los norteamericanos de todas las clases sociales esperan que el nuevo presidente pueda tomar las riendas del gobierno por un camino inclusivo y de respeto a la 14a Enmienda a la Constitución de los Estados Unidos: Derechos Civiles (1868) entre todos grupos étnicos minoritarios e inmigrantes que componen esta gran nación.
Nosotros fuimos testigos de otro hecho que marcó la historia norteamericana en esta juramentación presidencial. Esta es la primera juramentación de una mujer afroamericana Kamala Harris al cargo de vicepresidenta de los Estados Unidos de la mano de una mujer latina, Sonia Sotomayor quien es una Juez Asociado de la Corte Suprema de los Estados Unidos. Ella a su vez hizo historia con este nombramiento, cuando fue nominada por el presidente Barack Obama el 26 de mayo de 2009.
La responsabilidad del nuevo presidente Biden de terminar todas las políticas desfavorables implementadas por el ex presidente Trump, no se dejó esperar, ya que el mismo día de su juramentación como presidente este firmó varias Órdenes Ejecutivas. En los primeros días de su administración estas 30 órdenes van a detener el financiamiento para la construcción del muro fronterizo de Trump, revertir la prohibición de viajar de Trump dirigida a países mayoritariamente musulmanes, imponer un mandato de máscara en la propiedad federal, aumentar los suministros de vacunación y requerir viajeros internacionales de proporcionar prueba de una prueba de Covid-19 negativa antes de viajar a los EE. UU. La firma de estas Órdenes Ejecutivas presidenciales es un acto firme en terminar por completo el legado del expresidente Trump.
Otro evento histórico de la presidencia de Biden es que este asume incondicionalmente la diversidad de los líderes políticos de todas las comunidades que viven en el país para que sean parte de su gabinete de gobierno. Esto es un paso gigantesco desde que George Washington, el primer presidente de EE.UU., creó su primer gabinete en 1791, todos sus miembros eran blancos y hombres.
Por esta razón y en más de 200 años después, la llegada al poder de Biden supone un cambio radical: el nuevo mandatario ha propuesto para formar parte de su gobierno el que se considera el equipo más diverso en la historia de la nación.
El intento de golpe de estado fallido del ex presidente Trump dejó a la democracia de la nación norteamericana en verguenza internacionalmente. Las acciones del presidente Biden pone claro que su agenda presidencial es rescatar el país y crear un ambiente de unidad nacional para erradicar el intento fallido terrorista de derrocarlo y terminar la idea de una guerra civil por el odio racial.
Aun estamos a la espera de ver los cargos criminales que pudieran ser imputados al presidente saliente Donald Trump. Este que lideró un ataque terrorista al Senado de los Estados Unidos y que ha creado mucha especulación de su futuro y si tendrá que defenderse en las cortes norteamericanas. Este de ser condenado sería el evento histórico más grande que pudiera marcar el nuevo presidente electo Biden de su gobierno, el cual todos esperamos que sea una realidad.