Lamenta dirigencias políticas haya disminuido en un muy alto grado su fuerza y poder moral
LAS GUARANAS. SAN FRANCISCO DE MACORÍS. El director general del Consejo Regional de Desarrollo (CRD), Ysócrates Andrés Peña Reyes, dijo aquí que la muy penosa crisis de valores junto a la profundización de la corrupción y la delincuencia que corroen las diversas instancias de nuestra nación, que atentan en contra de las familias dominicanas presentan un panorama que no se pinta muy bonito en el actual gobierno y al país.
El connotado líder,asimismo expresó que lo peor es que las diversas instancias de nuestras entidades políticas han perdido en un alto grado la fuerza y poder moral para enfrentar tan gravísima problemática, estando convocados y obligados a tomar un mejor rumbo.
Expuso, que a lo indicado se ha añadido una real falta de sabiduría y desprendimiento, al no dejar poner en manos de los liderazgos que encarnan las nuevas generaciones y de las instituciones más sanas de la sociedad dominicana, el accionar valiente que requiere lamuy perjudicial situación.
Dijo que a esto se une el pobre accionar, en torno aque muchas personas se aferran lograr un cargo público entregando a cambio la dignidad y la integridad moral que les exige el buen legado que requiere la vocación de bien y un idóneo legado social, además, las obligaciones frente a una sociedad que espera lo mejor de lo mejor de sus ciudadanos.
Expuso, que ante esta triste realidad que golpea y obstaculiza el desarrollo y la paz social en nuestra nación,se impone dar paso a una plataforma diáfana guiada por los más sanos principios e intereses engendrados en las nuevas generaciones presentes y futuras, para lograr antídotos eficaces a la crisis de valores, la delincuencia y las diferentes manifestaciones de la corrupción.
Llamó comprender que las acciones contra la corrupción y otros males debe rebasar el hecho del sometimiento judicial, ya que, el principal objetivodebe serlograr nuevos patrones de conductas,que conduzcan al establecimiento deun pensar y mentalidad que produzca con certeza el fortalecimiento y el saneamiento moral de nuestras entidades estatales, como hacia nuestras familias y todos los entornos de la sociedad dominicana.
Al intervenir en un foro virtual en el que participaron líderes de entidades éticas y religiosas del Cibao y país, finalmente instó a todos los sectores constituirse en guardianes frente a tan penosa realidad, así como también, a los funcionarios públicos entender que no es solamente denunciar males anteriores, sino que su tarea es no cometer el funesto error de volver a cometerlos y además aprender a administrar bien las entidades bajo su cargo.