por Víctor Suárez
presión alta, diabetes, arteriosclerosis, cáncer, artritis reumatoides, enfermedades gastro intestinales, enfermedades del corazón y un sin numero de enfermedades degenerativas. Las farmacias llenas de gente buscando medicinas, los hospitales llenos de pacientes, millones de gente muriendo en todo el planeta.
Ahora se suman los virus desde el Covid 2 hasta el 19, ómicron, variante delta y una serie de mutaciones de estas mismas sepas, que mantienen cautiva a la humanidad, nos hemos aferrados a las mascarillas como único instrumento confiable, el cual nos podría salvar la vida, por que las medicinas existentes no nos aseguran nada.
Las farmacéuticas se han convertido en multinacionales, multimillonarias, nutriéndose del gran drama de un mundo enfermo, el mundo cambio de repente y no para nada bien, la esperanza no es hermosa, sino, de un sombrío futuro humano, la gente mira el horizonte y no siente, no ve nada alegador para los próximos años por venir.
El mundo está enfermo y no es sólo por las enfermedades, sino, de esperanza, estamos sumidos en la más cruel oscuridad, como si el planeta ha decidido regresar al principio de los tiempos, cuando aun el hombre vivía en las cuevas, cuando la esperanza de vida era desde los treinta a cuarenta años.
Que nos pasa entonces, se une el desamor, el odio, la violencia, la desidia, nadie le importa a nadie, cada quien en su propio mundo, nos tenemos miedo los unos a los otros, somos desconocidos, como si fuéramos de otro mundo, de otra raza, de otra galaxia.
siento tristeza de mi mundo, de mi hermoso mundo, el cual nosotros mismos lo hemos llevado a una degeneración global, en la que nadie respeta a nadie, cada uno se importa así mismo, vivir bien es en objetivo y entonces, más que enfermos por las típicas enfermedades comunes en el ser humano, estamos conectando neuronas nuevas y creando enfermedades mentales.
Ahora aunque somos vecinos, quienes entramos por la misma puerta a nuestras casas, somos desconocidos, es difícil decirnos, hola buenos días, que nos pasa, al parecer sin darnos cuenta, nos hemos enfermado, de odio, rencor, parejería, vanidad y un sin numero más de cosas, las cuales, más que unirnos como seres humanos, colocan un abismo entrenostros.
@VICTORSUAEZCRD