La poesía de Víctor Suárez, poeta y cantautor dominicano.

EL TIEMPO PASA

Crueldad del tiempo.

que en su lento pasar me disminuye.

Tiempo que mata, que todo lo destruye,

en momentos tristes o alegres.

todo cambia, todo muere.

TE AMO
Te amo porque eres trigal
y en tu celestial sembradío
se enredan tu amor y el mío
en el surco de pasión total
en los amaneceres de ámbar.

Porque eres primavera te amo,
contigo soy un constante renacer,
que sigue atado a tu querer
y despierto en lo soñado.

Mi claridad se expande y estalla
cuál de sol un círculo sublime
de sueños de amor de querubines,
de besos en tu boca que no para de besarme.

Me gusta perderme en tus días.
encontrarme en tu manojo de dulzura,
tu cimentando con cariño la ternura
que alimenta cada instante mi alegría.

Mi cantar de gaviota en vuelo,
en amaneceres de luna
ciñen de amores la bruma
y matizan de rocío los te quiero.

Mi capullo se abre en tus suaves manos
cada vez que tu labios me besan
y el sol del alba me confiesa
que sigues siendo mi amor soñado.

MI PERRO

Mi perro ladra esta noche de luna,

algo le entristece, algo le abruma.

Por el jardín mi perro, sube y baja, baja y sube,

con su aullido pesaroso,

a su dolor me embiste,

así me lleva, de la noche lúgubre

a mi alma triste.

Aúlla al pie de la ventana,

como si el dolor lè martirizara,

pero al final presiento que no le duele nada,

es mi tristeza que descubre,

entonces mi perro, mi buen amigo,

quiere borrar las penas conmigo,

por eso aúlla con cruel ladrido,

entre las flores, sube y baja, baja y sube.


TU MANO

Llovía música del cielo,

cada gota se cotejaba en el rítmico latir de tu corazón,

donde descanso mi cansancio.

Caía esencia perfumada del infinito

y nos abrazaba tiernos a su esencia;

tu y yo dos amantes.

El sabor de tu boca en la mía, atados al sublime éxtasis.

Lavamos nuestros cuerpos en el arroyo cristalino

y encadenamos nuestras almas a un mismo destino.

EN TU NOMBRE

Señor en tu nombre bendigo la mañana,

me abrazo al día infinito,

sobre notas de tu amor divino,

dulzura que se derrama como luz a mi alma.

En las alas de tu bien me deslizo,

me ofrezco como cauce a tu río

que de tu gloria se desborda.

VUELVE

Vuelve fugada estrella a las calladas noches de mi vida,

alegre aurora de mis penas vuelve, vuelve, vuelve,

vuelve a llenar mis ansias con tu risa,

Verdadera primavera de un clavel quemado al sol,

vuelve Abril de mis quimeras.

vuelve, vuelve, vuelve.

PERDONAME

Soy culpable de tu invierno

de la sombra que te cubre

de tus noches largas,

de tus madrugadas de soledad,

y de tu llanto.

Llené tu alma ingenua con mi amor

luego levanté vuelo.

Hoy tus ojos se vuelven estrellas buscándome en el horizonte.

VUELO DE PALOMA

Construimos transparencias al amor

a las rosas pusimos alas,

pintamos de mediodía las noches

y dibujamos corazones en el cielo.

Nos enredamos en vuelo de paloma

y nos perdimos entre sus alas,

entre el mar y el lucero.

Tu me llamaste amanecer

yo te llamo horizonte abierto.

Hemos coloreado los atardeceres

dando nombre a nuestros sueños

sobre la esperanza.

EL SOL

El sol se adentra en mi piel

achicharrando de súbito la oscuridad

su luz se esparce como rayos entre mis ojos.

Me pierdo en su espesura de perfecto amor parido

y al través de sus brazos de cristal,

derrama al mundo su paz.

SOLEDAD

Me duele el alma al verte partir

lloran mis ojos en soledad febril;

Tu partida rompe en pedazos Mi orgullo, mi altivez;

tal vez no vuelva nunca a amar como te amé.

ALERO DE ANHELO

Tu corazón un ala viva es,

alero de anhelo,

lluvia de medio día sobre los campos verdes.

Tu corazón una esmeralda es,

Ojo de paloma en vuelo tocando el cielo.

TUS OJOS

Tus ojos dos lagos gigantes como el alba me miran cerrados

me llevan a la mañana.

EL VIENTO

El viento me llamó hermano

yo le llamé la vida

porque existe existo.

Me marcho lejos sobre muchedumbre de alas azules,

soy un corazón gigante

que ama que pulsa mis venas y crece.

Mi corazón recorre la ciudad

silbando un himno alegre

sin límite en los cuatro puntos

porque el amor en el alma es inmenso como sutil.

EL AGUA

El agua me llamó hermano

yo le llamo inmensidad

Porque existe existo

y por su sed lloro.

Su vientre tiene corazón y tiene vida

y ama, tanto, que se revienta en olas

y se derrama en las rocas

y se deshace en mi boca.


EL AMANECER

Al amanecer se ata a mi silencio

batiéndose entre la soledad y el grito,

a los límpidos colores del infinito abro mis surcos

que de rosales siembro.

La oscuridad alejándose cuál el viento.

En los tejados, el sol tiende su brillo,

en sus esplendorosos colores me maravillo

y expongo a su luz mi pensamiento.

Como la noche, pesado el manto,

otra vez la soledad me cubre.

yo, tras la vida, sin descanso sin tregua

contemplar la luz tan solo quiero

y despertar mi descanso en el cielo.

@victorsuarezCRD

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